Lecciones municipales de atar en verano
Los chicos se lanzan de cabecera, hacen la bomba o la gamba, las chicas les miran entretanto se banan. Las madres cuidan de sus diminutos y no ha transpirado charlan con alguna amiga. Cinco o seis seres se enfrascan en la lectura de revistas o libros. Un grupo de chicas juega al voleibol sobre arena artificial. Cuando atardece, en la alberca sobre Navalcarnero cada conjunto se retira a sus casas o a los bares o a en donde sea falto tener entablado chachara con el otro. Seguramente los chicos estuvieron excelente pieza de el lapso mirando asi como hablando de las chicas, y no ha transpirado ellas, por consiguiente igual, hablando de ellos. No obstante, ayer por la tarde cuatro monitoras, coordinadas por Juan de Dios, de la agencia de la Concejalia sobre desarrollo de Navalcarnero, se esforzaron en convencer a las chicos, de dentro de 12 y 16 anos, participantes en un taller para aprender a atar de que se irian mas contentos a morada En Caso De Que conseguian hacer un amigo o amiga.
Porque el proposito de el taller, a pesar de el apelativo, no seria introducir a los adolescentes en el sexo, sino que sean aptos de desenvolverse en situaciones sociales desprovisto apreciar verguenza. El taller se enmarca en el programa Un estio distinta, que alcahueteria sobre animar las actividades sobre los chicos con juegos diversos. Las monitoras, que tuvieron que cazar con trampa a los chicos dispersos por la piscina, consiguieron formar un circulo a la sombra de un arbol, compuesto primeramente solo sobre chavales.